martes, 18 de febrero de 2014

Conventillos en La Boca: el drama eterno de la precariedad habitacional

Un informe de la Asesoría Tutelar General da cuenta del constante riesgo de incendio y derrumbe de estos edificios; un recorrido en imágenes por el interior de estas viviendas


El incendio ocurrido el lunes pasado en un conventillo de La Boca, por el que debieron ser evacuadas 26 familias, vuelve a poner en escena el conflicto habitacional de miles de personas en la ciudad de Buenos Aires.

Un informe de la Asesoría General Tutelar de la Ciudad da cuenta que del total de consultas que recibió la Oficina de Atención Descentralizada por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia Boca- Barracas (OAD), entre 2009 y 2012, un 28 por ciento fueron sobre problemáticas habitacionales. De ese 28%, el 68 % se refiere específicamente a la problemática de los conventillos privados.

El informe destaca que la situación más crítica se vive en la Comuna 4, integrada por La Boca, Barracas, Parque Patricios, y Nueva Pompeya.

La OAD cita el Informe Final Diagnóstico del Plan Urbano Ambiental 2010, según el cual en el Barrio de la Boca se concentra el 70% de los inquilinatos, los cuales albergan a aproximadamente 5.500 familias.

La mayoría de estos conventillos, según pudo constatar la OAD, tienen serios problemas estructurales, pésimas condiciones de seguridad y gran precariedad sanitaria.

"El problema presenta varias aristas, y plantea una solución compleja, ya que intervienen e interactúan múltiples partes: privados, poder judicial nacional y fuero contravencional local, Estado local y mercado inmobiliario., concluye el informe.

"La mayoría de los conventillos están metidos en peleas sucesorias, entonces mientras eso no se resuelve, son ocupados, porque hay gran necesidad de vivienda", explica Andrea Ventura, a cargo de la OAD.

Los incendios son bastante frecuentes en estos conventillos, donde habitan varias familias juntas, muchas veces pagando un alquiler que es cobrado ilegalmente por personas que no necesariamente son los dueños de los edificios.

"Al no haber políticas serias públicas de viviendas, se genera la emergencia habitacional. El mercado informal se cotiza, porque en general quienes tienen esta necesidad de vivienda son personas sin garante ni recibo de sueldo", cuenta Ventura. "Por ejemplo, el valor de un departamento de dos ambientes de un conventillo que se viene abajo oscila en más de 2 mil pesos", informa.

Ventura relata también el drama que sigue a los siniestros en estos edificios. "Cada vez que hay un incendio en un conventillo, quedan en la calle unas 12 familias. Hay que tener en cuenta que estamos hablando de estructuras del siglo pasado, que son o eran privadas y no fueron mantenidas", explica.

Fuente: La Nacion

Link: http://www.lanacion.com.ar/1663226-como-es-un-conventillo-de-la-boca-por-dentro

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